Cuando todo parecía sentenciado a favor del joven piloto de McLaren, Lewis Hamilton, la fortuna ha decidido dar un golpe de teatro dejando fuera de pista al actual líder del mundial, a falta de 25 vueltas, cuando iba segundo (resultado que le hubiese dado matemáticamente el mundial).
La carrera ha empezado en mojado, y Hamilton aprovechó su pole para mantener el primer puesto, seguido de Kimi y Massa que tuvo problemas para mantener su tercera posición en la salida, pero al final consiguió recuperarla. Pasaron las vueltas y dejó de llover, la pista empezó a secarse y Hamilton empezó a tener problemas con sus neumáticos intermedios, hecho que aprovechó Kimi para adelantarle, y cuando el inglés se disponía a entrar en boxes para cambiar sus neumáticos no pudo controlar el coche y terminó en la grava.
Por su lado, Alonso pudo aprovechar la debilidad de Massa en mojado, y consiguió ponerse delante cuando éste se disponía a entrar en boxes, aunque con pocas opciones de alcanzar a Kimi.
Como suele ocurrir en mojado, la carrera era una lotería, trompos, remontadas de pilotos con pocas posibilidades, buena actuación de coches modestos, etc., y un claro ejemplo fue la fantástica carrera de Sebastian Vettel, el piloto de Super Toro Rosso que salía desde el decimoséptimo puesto y terminó cuarto, por detrás de Kimi, Alonso y Massa, y por delante del piloto de Honda Jenson Button (5º), su compañero de equipo Vitantonio Liuzzi (6º), el alemán de BMW Nick Heidfeld (7º), y el veterano escocés de Red Bull David Coulthard (8º).
Con este resultado (abandono de Hamilton, victoria de Kimi y segundo puesto de Alonso) el mundial llega a su última cita (dentro de dos semanas en Brasil) con tres pilotos con aspiraciones al mundial. Hamilton parte con la ventaja, le bastaría con un segundo puesto y así no depender de lo que hagan los demás; Alonso necesita ganar y que Hamilton quedara tercero, o si no gana restarle al menos cinco puntos; Kimi lo tiene más difícil, necesitaría quedar primero, que Alonso quedara tercero y Hamilton sexto, un resultado difícil pero no imposible.
Sea como sea: "Go Kimi!, go!"
Ho!
La carrera ha empezado en mojado, y Hamilton aprovechó su pole para mantener el primer puesto, seguido de Kimi y Massa que tuvo problemas para mantener su tercera posición en la salida, pero al final consiguió recuperarla. Pasaron las vueltas y dejó de llover, la pista empezó a secarse y Hamilton empezó a tener problemas con sus neumáticos intermedios, hecho que aprovechó Kimi para adelantarle, y cuando el inglés se disponía a entrar en boxes para cambiar sus neumáticos no pudo controlar el coche y terminó en la grava.
Por su lado, Alonso pudo aprovechar la debilidad de Massa en mojado, y consiguió ponerse delante cuando éste se disponía a entrar en boxes, aunque con pocas opciones de alcanzar a Kimi.
Como suele ocurrir en mojado, la carrera era una lotería, trompos, remontadas de pilotos con pocas posibilidades, buena actuación de coches modestos, etc., y un claro ejemplo fue la fantástica carrera de Sebastian Vettel, el piloto de Super Toro Rosso que salía desde el decimoséptimo puesto y terminó cuarto, por detrás de Kimi, Alonso y Massa, y por delante del piloto de Honda Jenson Button (5º), su compañero de equipo Vitantonio Liuzzi (6º), el alemán de BMW Nick Heidfeld (7º), y el veterano escocés de Red Bull David Coulthard (8º).
Con este resultado (abandono de Hamilton, victoria de Kimi y segundo puesto de Alonso) el mundial llega a su última cita (dentro de dos semanas en Brasil) con tres pilotos con aspiraciones al mundial. Hamilton parte con la ventaja, le bastaría con un segundo puesto y así no depender de lo que hagan los demás; Alonso necesita ganar y que Hamilton quedara tercero, o si no gana restarle al menos cinco puntos; Kimi lo tiene más difícil, necesitaría quedar primero, que Alonso quedara tercero y Hamilton sexto, un resultado difícil pero no imposible.
Sea como sea: "Go Kimi!, go!"
Ho!
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