Beowulf

Se podría decir que en los últimos años Robert Zemeckis se ha volcado de pleno en la animación digital, primero con 'The polar express' y más recientemente con 'Beowulf'. En ellas Zemeckis ha utilizado la captura de movimientos para tratar de darle mayor realismo a los movimientos de los humanos, y de paso recrear la imagen de actores famosos, por ello en 'Beowulf' podremos reconocer a Ray Winstone, Anthony Hopkins, o Angelina Jolie entre otros.

'Beowulf' adapta un poema épico que narra la aventura de un héroe:

Un demonio llamado Grendel aterroriza una región de Dinamarca. Impotente ante esta maldición que le persigue, el rey Hrothgar hace un llamamiento a los guerreros más poderosos del mundo: la mitad de su fortuna a quien sea capaz de acabar con él. A esta llamada acude el famoso gauta Beowulf, acompañado de 14 de sus mejores hombres. Beowulf derrotará a la bestia, pero una nueva amenaza se cernirá sobre el desprevenido reino: la madre de Grendel, tan cruel y sanguinaria como este, pero mucho más astuta y seductora.

En esta película Zemeckis puso mucho empeño en tratar de mejorar uno de los puntos más criticados de 'The polar express', la falta de expresividad de los ojos.


Empezaré a opinar del aspecto técnico, porque he tenido la impresión de que Zemeckis ha querido darle mayor protagonismo a la forma que al fondo, he notado más cuidado en los aspectos técnicos que en la historia o en el desarrollo. Eso sí, hablamos de un aspecto técnico impresionante, pero que aún sigue arrastrando los mismos defectos en cuanto a la recreación de los movimientos humanos, y es que aún siguen siendo poco creíbles. Otro punto flojo también deriva del empeño de tratar de sorprender con el máximo detalle, pero, en comparación a los personajes protagonistas, el detalle de algunos personajes secundarios palidece.

En cuanto a la historia, en 'Beowulf' se nos muestra a un héroe fanfarrón, que no duda en exagerar sus gestas o incluso atribuirse hechos que no le corresponden con tal de hacer escuchar su nombre. Es quizás un punto de vista diferente al que se suele mostrar en este tipo de aventuras épicas, pero que da bastante sentido al desarrollo, ya que es algo que con el tiempo le irá pesando hasta que esa carga se le vuelva en su contra


No me andaré con rodeos, bajo mi punto de vista veo a la película de un bien, rozando el aprobado más que el notable.


Ho!