Resident evil: The darkside chronicles

Tras las buenas ventas de 'Resident evil: The Umbrella chronicles' Capcom no dudó en sacar otro título para Wii con la misma mecánica, desarrollado nuevamente por Cavia, y rescatando las historias de los otros dos títulos de corte clásico que quedaban: 'Resident evil 2' y 'Code: Veronica'.

Además de narrar las crónicas de Leon y Claire, 'The darkside chronicles' sirve para contar la relación de Leon con Krauser en una nueva historia, antes de los hechos de 'Resident evil 4'.

A parte de una mejora gráfica, son varios los cambios que hay en esta entrega respecto a su predecesora, como el relevo del nunchuk no permitiendo mover ligeramente la cámara, o el incremento de los episodios en detrimento de los capítulos extras que ofrecía 'The Umbrella chronicles'.


Aunque 'The Umbrella chronicles' me gustó bastante, cuando Capcom anunció un nuevo shooter por raíles me decepcionó un poco, y no recibí el juego con mucho entusiasmo, y una vez me puse a jugar algunos de los cambios no me gustaron, como el movimiento de cámara, o que en ocasiones la cámara no te deje terminar con todos los enemigos. Además, el mayor número de capítulos de las crónicas se me hicieron algo pesados ya que conocía de sobras la historia, y tampoco es que la historia nueva me pareciera muy interesante.

Aunque puede sonar muy negativo, el juego en general me ha gustado bastante, un buen arcade, con posibilidad de ir mejorando las armas y conseguir multitud de documentos secretos, y las fases extras, aunque escasas, me han enganchado bastante.

Técnicamente el juego mejora mucho gráficamente, estando a la altura o incluso por encima del resultado mostrado por 'Dead space extraction', aunque, teniendo en cuenta que en más de una ocasión y de dos pasamos por los mismos sitios, no hubiese estado de más que lo que destroces la primera vez que pasas no se regenerara una vez vuelves a pasar.


En general se podría decir que 'The darkside chronicles' es mucho más completo que 'The Umbrella chronicles', pero me gusta más la sencillez de este último.


Ho!