Lo más reseñable del juego es que, aunque sigue manteniendo la misma mecánica clásica de siempre, el objetivo del juego ha variado lo suficiente para ofrecer cierta nueva frescura: aquí jugamos contra el tiempo con la intención de conseguir nuestras mejores puntuaciones, con el añadido de que los laberintos se dividen en dos mitades, y hasta que no conseguimos coger todas las bolas de una mitad no se regenera la otra mitad.
Ahora mismo no recuerdo muy bien por qué compré el juego, pero he de reconocer que me ha servido para romper un poco la inercia que llevaba últimamente con los videojuegos, donde apenas jugaba a nada y cuando lo hacía era más bien por matar el rato. Así empecé a jugar a 'Pac-man championship edition DX+', para matar ratos mientras tenía alguna serie de fondo, aunque poco a poco me ha ido picando para superar todos los niveles, e incluso en alguno me ha dado por intentar superar mis propias puntuaciones, y al final, como el que no quiere la cosa, le he dedicado unas 11 horas de juego.
No hay mucho más que contar, técnicamente es lo que es, es 'Pac-man', un arcade en dos dimensiones al que puedes ponerle distintas apariencias, pero que en el fondo sigue siendo igual que el título original de los 80, tampoco necesita mucho más. Aunque sí que cabe decir que en este título he echado de menos algún modo de juego tradicional, pero bueno, título entretenido y adictivo.
Ho!
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