La película cuenta el increíble periplo de dos peces - Marlin y su hijo Nemo - que se ven obligados a separarse en la Gran barrera de coral, ya que Nemo es capturado por un buceador. El pobre termina en la pecera de la consulta de un dentista desde la que se divisa el puerto de Sydney. Marlin, con la ayuda de un simpático pero despistado pez llamado Dory (que carece de memoria inmediata), se embarca en un peligroso viaje. El precavido padre acaba convirtiéndose en el héroe de una verdadera epopeya cuyo fin es rescatar a su hijo, que por su parte ha urdido un descabellado plan para volver sano y salvo a casa.
Se trata de la quinta película de Pixar, y durante bastante tiempo la consideré como mi película favorita de animación por ordenador.
No era justo que el otro día hablase de 'Buscando a Dory' sin que nunca hubiese comentado esta, y es que pocas veces una secuela supera a la original, y esta no es una excepción. Aún recuerdo salir del cine contento después de una sesión donde Pixar me demostró que podía contar gags para todos los públicos, capaz de hacer que hasta el niño más travieso se estuviera quieto en su butacón, mientras sus padres disfrutaban también de la película.
Su apartado técnico era soberbio, en la línea de lo que Pixar nos empezó a acostumbrar, con un diseño del fondo marino excelente y precioso, y una banda sonora muy correcta y acertada. Por no hablar de que con el inicio de esta película Pixar no se cortó lo más mínimo, la película puede ser para todos los públicos, sí, pero su inicio puede resultar chocante, así como el pesimismo que acompaña a Marlin durante todo el viaje (paradójico, tratándose de un pez payaso).
Aún con el tiempo que ha pasado, en mi cabeza siguen perdurando cosas como el "sigue nadando", el estupendo "balleno" de Anabel Alonso (dobladora de Dory en la versión española), o el "mío-mío" de las gaviotas xD
Ho!
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