Sonny Weaver Jr., director general de los Browns de Cleveland, intenta fichar al número uno para su equipo de fútbol americano. La decisión que va a tomar implica sacrificios que pueden afectar a su vida personal y profesional y, además, puede significar un gran cambio en la vida de un grupo de jóvenes que sueñan con jugar en la NFL.
Kevin Costner encabeza un reparto compuesto por Jennifer Garner, Chadwick Boseman, Arian Foster, Josh Pence, Tom Welling, y Denis Leary entre otros.
No me andaré mucho por las ramas, porque sé que esta película no es nada del otro mundo, un director deportivo que ha de decidir qué jugador escoger en el "draft", con la presión del dueño del club por traer alguien que ilusione a la afición y venda entradas, la presión del entrenador por traer a un jugador que apuntale su sistema de juego, la presión de la afición para que el equipo haga algo grande por fin, y la propia presión que él mismo se impone. Pero a mí personalmente me gustan bastante este tipo de películas.
A la trama le cuesta arrancar, porque se embarulla a veces en jergas deportivas o nombres, pero lo cierto es que a la hora de la verdad no supone ningún problema, porque todo se va cociendo a fuego lento, trasmitiendo la presión a la que está sometido el protagonista, para dar paso a unos 15 minutos excelentes, un cuarto de hora de un clímax redondo.
Las actuaciones por lo general no destacan, pero cumplen, y la realización de la película consigue dar cierto dinamismo a una película que, sí, trata de fútbol americano, pero el menos interesante para los aficionados, el de los despachos.
Ho!
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