La historia tendrá lugar en Londres, durante la gran depresión. Ahora Jane y Michael Banks ya son adultos y, junto con los tres hijos de Michael, reciben la visita de la enigmática Mary Poppins tras sufrir una pérdida personal. Gracias a sus inigualables habilidades mágicas, y con la colaboración de su amigo Jack, Mary Poppins ayudará a la familia a recuperar la alegría y la ilusión que falta en sus vidas.
A Emily Blunt le acompañan Lin-Manuel Miranda, Emily Mortimer, Ben Whishaw, Pixie Davies, Nathanael Saleh, y Joel Dawson.
Cuando se anunció una secuela de la mítica 'Mary Poppins', reconozco que tuve bastante recelo, y es que la sombra del clásico del 64 es muy larga. No en vano, cabe decir que el resultado cuenta con algunos números musicales bastante vistosos e imaginativos, y Emily Blunt me ha gustado mucho como Mary Poppins, no es Julie Andrews, pero consigue imponer un sello propio al personaje.
El problema de esta secuela es el resto del conjunto, que palidece en exceso al compararla con la original. La historia se esperaba un más de lo mismo, pero también algo de frescura que no parece tener, las canciones son excesivamente largas, y algunas muy continuadas, y, lo que es peor, ninguna canción es particularmente memorable.
En resumidas cuentas, una película entretenida, y por los pelos.
Ho!
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