En un futuro distópico, David, siguiendo las reglas que rigen el mundo, al verse soltero y contar con cierta edad, es arrestado y enviado a un centro de internamiento, que es una suerte de hotel, dónde hay hombres y mujeres en su misma situación. Si al cabo de 45 días no ha logrado encontrar pareja, será convertido en un animal de su propia elección. En su caso, David escoge una langosta.
Su falta de compenetración con sus otros compañeros de encierro y de candidatas convincentes hacen que David empiece a sopesar la posibilidad de fugarse de ese lugar, cosa que implicaría marginarse de forma definitiva de la sociedad, pues automáticamente pasaría a ser un forajido sin segundas oportunidades.
La película está protagonizada por Colin Farrell y Rachel Weisz, acompañados por John C. Reilly, Ben Whishaw, Angeliki Papoulia, o Léa Seydoux entre muchos otros.
Vi 'Langosta' hace años, en el 2017 para ser exactos, por una recomendación sobre películas con historias distópicas, y recuerdo que en su momento su planteamiento tan surrealista ya me dejó con el culo torcido, sí, pero había algo en ella que me atrapaba, y que me hacía querer seguir viendo más para entender mejor la sociedad que planteaba, pese a lo incómoda que resultaba la película por momentos.
En su día no la comenté porque aunque la película tenía ese halo que me hizo tenerla presente hasta ahora (que he visto otra película del mismo director), y me invitó a darle bastantes vueltas a su concepto una vez terminada, también es cierto que se va desinflando poco a poco (la parte de los solteros pierde bastante interés), el mensaje se vuelve algo contradictorio, naufraga mucho dentro de sus propias normas, y abusaba demasiado de la provocación fácil.
Una película interesante por su concepto y por el estilo del director, que además deja poso, pero que en mi caso no consigue un equilibro mayor para pasar del aprobado.
Ho!
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