¡Viaja hasta las míticas Northstar Islands en esta nueva versión de las clásicas aventuras de acción y plataformas en 2D de Sonic! Juega con Sonic, Tails, Knuckles y Amy, y usa los poderes Emerald para evitar que el Dr. Eggman, Fang y una nueva adversaria, Trip, conviertan a los animales gigantes de las islas en Badniks antes de que sea demasiado tarde.
El juego está disponible desde finales del año pasado para todas las plataformas: Nintendo Switch, Xbox One y Series, PC, y PlayStation 4 y 5. Yo he jugado a la versión de PS4.
Reconozco que cuando se anunció el juego, me llamó mucho su apartado artístico, ese tono tan colorido, esos escenarios tan ricos en detalles, ese acercamiento a los Sonics clásicos con tecnologías actuales... la verdad es que el juego me entró mucho por los ojos, así que fue inmediatamente a mi lista de deseados, pero, como tampoco es que me fio mucho del Sonic team, preferí pillarlo cuando lo encontrara barato. Y he hecho bien, porque el juego no está mal, pero es cortito y tampoco me ha parecido imprescindible.
Una vuelta del personaje a las mecánicas en 2D, donde más brilla, sólo por eso el juego ya merece la pena, pero su diseño de niveles no me ha entusiasmado mucho, primando de nuevo la velocidad vertiginosa por encima del plataformeo, y los abundantes jefes finales se me han hecho algo pesados.
Técnicamente el juego empieza bien, con una intro animada, un Green hills precioso, y unas animaciones del personaje muy vistosas, pero a medida que avanzamos en los distintos mundos, esos escenarios plagados de detalles van dejando paso a otros mucho más monótonos, y donde parece que cada vez había menos esmero, algo que también se nota en los tironcillos que hay de vez en cuando (nada preocupante de cara a la jugabilidad). Junto a una banda sonora bastante olvidable.
Entretenido y para pasar el rato, pero que palidece después del notable 'Sonic mania'.
Ho!
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