Dirigida por Shawn Levy, y con Ryan Reynolds y Hugh Jackman encarnando de nuevo a los mutantes regenerativos más famosos del universo Marvel, 'Deadpool y Lobezno' es la apuesta veraniega de Marvel para llevarnos al cine durante un par de horitas.
Wade Wilson intenta salir adelante como un ciudadano cualquiera. Sus días como Deadpool, el mercenario con una moral bastante dudosa, han quedado atrás. Cuando una amenaza existencial se cierne sobre su mundo, Wade vuelve reticentemente a la acción junto al más reticente… ¿reticentísimo? ¿reticentérrimo? Vamos, que deberá convencer a un reticente Lobezno para... Joder. Esto de las sinopsis es una puta gilipollez.
Junto a Reynolds y Jackman tenemos a Emma Corrin, Morena Baccarin, y Matthew Macfadyen, entre otros muchos.
No nos andemos por las ramas, 'Deadpool y Lobezno' es otra disparatada historia de multiversos, muy en la línea de lo visto ya previamente en 'Spider-man: Sin camino a casa' y también en 'Flash', pero con el tono irreverente y gamberro de Deadpool, que no duda en meterse con Fox, con Disney, y con todo lo que le apetece cada vez que rompe la cuarta pared, y con la que me he reído bastante, y con una puesta en escena a la altura.
Pero es que esto no va solo de Deadpool, que comparte protagonismo con Lobezno, y creo que estamos ante el mejor Lobezno cinematográfico, el que mejor respeta lo mostrado en los cómics, malhumorado, impulsivo, destructivo, instintivo, básico, solitario... y que no soporta la verborrea constante del mercenario bocazas, llevándoles a varias pelea entre ellos, perfectas para el fanservice.
En resumidas cuentas, una película la mar de divertida, y posiblemente con diferencia lo mejor del universo cinematográfico de Marvel en los últimos años.
PD: Hay una escena tras los créditos, es irrelevante, pero es bastante divertida xD
Ho!
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